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Los equipos de última tecnología, la amplitud del quirófano y la política de evitar la saturación del hospital son los motivos por los que los doctores eligen el centro inaugurado hace siete meses en el centro de Zaragoza

El traumatólogo Víctor Roda ha realizado la segunda operación de implante 3D personalizado en Aragón con esta técnica vanguardista que reduce el sangrado del paciente, el daño en el hueso y el tiempo en el quirófano

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Zaragoza 8 de abril de 2021. El Hospital HC Miraflores de Zaragoza se consolida como el espacio preferido por los cirujanos que desarrollan en Aragón nuevas técnicas quirúrgicas. Los motivos que impulsan a los médicos a elegir este centro sanitario son los equipos de última tecnología con los que está dotado el hospital, la amplitud del quirófano, el positivo impacto que causa en los pacientes el diseño de las habitaciones y las consultas externas y la política de la gerencia del complejo sanitario de evitar la sobresaturación del área quirúrgica.

El último especialista que ha apostado por las instalaciones del Hospital HC Miraflores de Zaragoza ha sido el traumatólogo Víctor Roda, que junto con el doctor Jorge Camacho y el equipo médico del centro sanitario, culminó ayer una operación de implante de prótesis de rodilla realizada con un sistema de impresión 3D. La segunda que se desarrolla en Aragón. Se trata de una técnica pionera no sólo en la comunidad autónoma, sino en toda España, ya que sólo en Madrid, Cataluña y Andalucía se han realizado operaciones con el mismo sistema. Básicamente, lo que hace el equipo médico es realizar un estudio completo TAC 3D de la rodilla del paciente y ordenar la reproducción fiel de la articulación para obtener un implante 100% personalizado y adaptado a su anatomía. La prótesis, desarrollada por ConforMIS y comercializada por Medcomtech, se reconstruye tridimensionalmente a partir de ese estudio de TAC 3D de la persona, que se envía con una antelación de dos meses con respecto a la fecha de la operación.

Las ventajas de utilizar esta técnica de intervención quirúrgica son múltiples: se reduce la pérdida de sangre del paciente, el daño al hueso y el tiempo tanto de quirófano como de la recuperación postoperatoria. Asimismo, se simplifica notablemente el uso de instrumental, puesto que apenas se precisan las herramientas que caben en un pequeño maletín.

“La cirugía es muy novedosa en España y destaca por el aumento del beneficio para el paciente. Hay una gran labor de ingeniería detrás del proceso de recreación de la rodilla y eso permite que el estudio del paciente se realice con semanas de antelación, y en consecuencia las decisiones quirúrgicas se toman antes y se llega a la operación con mucho trabajo hecho. Esto se traduce en mayor precisión, menor tiempo en el quirófano y por tanto menor inflamación, menor pérdida de sangre y menor daño al hueso”, explica el doctor Víctor Roda, traumatólogo que ha dirigido esta cirugía.

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PROCESO DE ENTRE 6 Y 8 SEMANAS

La clave de esta nueva tecnología es la personalización 100% de cada prótesis, que se consigue mediante una sencilla labor de planificación preoperatoria que comienza entre 6 y 8 semanas antes de la operación. El traumatólogo realiza un estudio de imagen por TAC a partir del cual se realizará la reconstrucción tridimensional de la rodilla. Ese estudio de TAC se envía a Estados Unidos, a la empresa ConforMIS, donde además del implante se producen unas guías específicas que marcan los cortes a realizar por el traumatólogo, a modo de ‘negativos’ de la rodilla del paciente, para que la colocación de la articulación sea precisa.

“Lo primero que me llamó la atención al empezar a estudiar esta técnica es la precisión y la simplificación que gana el cirujano, el instrumentalista y el resto del equipo que participa en la operación; el instrumental se reduce a la mínima expresión porque en vez de trabajar con prótesis de tamaños estándar que debes encajar en el paciente adaptándolo al cuerpo, aquí el acople es perfecto a través de las guías que ya previamente el laboratorio ha preparado en base a las decisiones que has tomado acerca del nuevo eje que mantendrá el cuerpo del paciente ”, explica el doctor Roda. De ahí que el instrumental necesario para la operación sea mínimo. “Apenas una cajita”, apunta el traumatólogo.

Los implantes de prótesis de rodilla realizados con sistema de impresión 3D se encuentran muy consolidados en países como Estados Unidos o Alemania. Y ahora, gracias a este paso dado por el doctor Roda en el Hospital HC Miraflores de Zaragoza, se acerca aún más a los aragoneses. El coste de la intervención es ligeramente superior a la de la operación con prótesis estándar. “No obstante, el índice de satisfacción es muy bueno, porque se elimina el dolor residual. Con las prótesis convencionales (funcionando muy bien, como funcionan) la persona se sigue notando la rodilla como algo externo y esto, si el paciente es activo y le queda larga vida por delante, puede resultar incómodo y generar inseguridad a la hora de retomar la vida habitual”, explica Víctor Roda.

El perfil de quien demanda esta operación es el de una persona de entre 65 y 80 años, con artrosis de rodilla por desgaste articular, aunque también se implantan prótesis en gente más joven.

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PERFIL DEL DOCTOR VÍCTOR RODA

El doctor Víctor Roda es traumatólogo. Estudió en la Universidad de Zaragoza y durante cinco años realizó su Residencia en el Hospital Miguel Servet. Posteriormente, se incorporó al equipo del Hospital Militar de Zaragoza, donde empezó a compaginar el servicio público con la sanidad privada. Posteriormente, su afán por la investigación y la formación continua, le llevó a centrar se en la sanidad privada y actualmente colabora con varias clínicas y se mantiene activo en el campo de la investigación. En el año 2019 recibió el Premio Doctoralia Awards y en el año 2020 también fue uno de los nominados.

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