Cuando hablamos de depresión, muchas veces pensamos en un trastorno silencioso, algo que las personas ocultan detrás de una sonrisa. Sin embargo, este problema de salud mental también puede manifestarse de formas visibles, que impactan el día a día de quienes la padecen. Reconocer estos síntomas no solo es crucial para el propio bienestar, sino también para apoyar a quienes nos rodean.

Aquí te dejamos algunas señales que podrían indicar que alguien está luchando contra la depresión:

1. Expresiones faciales o lenguaje corporal apagados
   Una mirada triste, hombros encorvados o gestos lentos pueden ser indicios de un ánimo decaído. A menudo, las emociones de la depresión se reflejan en el cuerpo.
2. Fatiga constante y falta de energía
   Si alguien parece siempre cansado, sin importar cuánto descanse, podría ser más que agotamiento físico. La depresión roba energía incluso para las tareas más simples.
3. Cambios significativos en el peso o apetito
   Comer en exceso o perder el interés por la comida puede ser una forma en la que la depresión se manifiesta físicamente. Estos cambios pueden ser repentinos y marcados.
4. Dificultades para mantener la concentración
   Es común que las personas con depresión tengan problemas para tomar decisiones o seguir conversaciones. Esto puede ser visible en un desempeño laboral o académico afectado.
5. Irritabilidad o aislamiento
   Aunque solemos asociar la depresión con tristeza, también puede expresarse como irritabilidad o enojo. Asimismo, es habitual que las personas con depresión se alejen de su círculo social.
6. Dolor físico inexplicable
   Dolores de cabeza, musculares o problemas digestivos frecuentes, sin una causa médica clara, pueden ser síntomas de una depresión subyacente.

La depresión no discrimina, puede afectar a cualquier persona en cualquier etapa de su vida. Reconocer estos síntomas en uno mismo o en otros puede ser el primer paso para buscar ayuda profesional. Si crees que tú o alguien cercano está pasando por esto, no lo ignores. Hablar de ello, escuchar sin juzgar y recomendar acudir a un especialista puede marcar una gran diferencia.

Recuerda: no estás solo. Identificar estas señales visibles es una oportunidad para brindar apoyo y acompañamiento. La depresión puede tratarse, y la ayuda está a solo un paso.